Tres lugares de ensueño para una novela romántica

11.06.2021

 Se dice, y no sin razón, que, entre los elementos clave para hacer que una novela romántica funciones, hay uno fundamental y que demasiado a menudo es olvidado por los escritores de romántica. Hablamos, como ya habréis supuesto, del lugar en el que transcurre la narración. Porque, seamos sinceros, no es lo mismo ambientar una historia romántica en el Madrid contemporáneo que situarla en una paradisíaca playa de fina arena blanca, o en la noche parisina, o en la romántica Venecia... y podría seguir con más ejemplos, pero no estamos aquí para eso. Hoy vamos a conocer algunos de los lugares de ensueño más acertados para dar a nuestra novela romántica una ambientación que acentúe el romance. Como suele decirse, ¡el amor está en el aire!

New York. ¡New York! ¡La Gran Manzana! ¡Central Park! ¡Broadway! ¡Y la Estatua de a Libertad! New York, una de las ciudades más importantes y emblemáticas del mundo, es, sin duda, una ambientación excelente para cualquier historia romántica que queramos narrar. Si algo hemos aprendido del cine es que cualquier cosa es posible en New York, así que no te lo pienses demasiado... ¡y lánzate!

Puedes contar la historia de dos personas que se conocen en Central Park, quizás mientras uno hace deporte y el otro pasea a su perro, y comienzan a quedar allí a diario, lo que hace que se conozcan, y...

O puedes hablarnos de una actriz de Broadway que se enamora de un espectador, el cual, extrañamente, va a verla a cada función, y...

¡Hay incontables historias escondidas en New York!

París
París

Granada. También en España hay lugares románticos, y esta ciudad andaluza es buena muestra de ello. La preciosa Alhambra, los baños árabes de Granada o incluso Sierra Nevada pueden ser el escenario perfecto para una historia de amor. Ya lo demostró Eva Barón Ortega, cuya novela romántica, Nos volveremos a ver, tiene Granada como uno de los escenarios en los que transcurre la primera de las tres historias de amor que narran sus páginas. Si no lo habéis leído todavía, recordad que podéis comprar el libro aquí.  

New York
New York

París. Pocas presentaciones necesita la Ciudad de la Luz, una de las principales capitales europeas y, además, ciudad considerada como una de las más románticas urbes contemporáneas. Da igual si hablamos de Notre Dame, de El Louvre, del río Sena o de la mismísima Torre Eiffel; todos esos lugares han sido mudos testigos de diferentes historias de amor tanto en la literatura como en el cine. Solo hay que dar un paseo nocturno por París para comprender por qué está considerada una de las ciudades más románticas del mundo, si no la que más.

Haz que tus dos protagonistas se conozcan durante una travesía en barco por el Sena, o paseando bajo la Torre Eiffel, o que se descubran el uno al otro mientras ambos observan fascinados la Mona Lisa en el Louvre. ¡Las opciones son infinitas!

Granada
Granada

 Sea como sea, hay una cosa que debes tener clara antes de elegir el lugar en el que estará situada tu novela: es conveniente que lo conozcas bien o, en su defecto, que te documentes y te informes al respecto. Te daré dos motivos: primero, que resulta muy complicado escribir sobre algo que no conoces; segundo, que solo conociendo bien el lugar podrás aprovecharlo al máximo. A fin de cuentas no basta con decir que la acción transcurre en un lugar, ¡tienes que conseguir que el lector sienta que él también está allí!

¡Volvemos la semana que viene con más artículos!